En una nota anterior (Comer, disfrutar y proteger al corazón), hemos señalado que es posible comer alimentos agradables y variados sin que por ello se comprometa o se ponga en riesgo la salud cardiovascular.

En el caso de los niveles de colesterol, pueden mencionarse 3 tipos de alimentos: el ajo, el aceite de oliva extra virgen y las almendras.

• Aceite de oliva extra-virgen

No sólo es conveniente reemplazar la grasa de origen animal por aceites vegetales, sino que dentro de este último grupo existen algunos que tienen propiedades superiores. Es el caso del aceite de oliva extra virgen, que posee un grupo especial de ácidos grasos (grasas monoinsaturadas) que no sólo descienden el colesterol perjudicial ("colesterol malo") sino que aumentan los niveles del colesterol "bueno" circulante. Aunque su costo es algo mayor que el aceite "mezcla" o el de otras variedades (maíz, uva), sus beneficios son notables y, si los emplea en cantidades razonables evitando frituras, ese costo no es tan oneroso.
Pruebe de utilizarlo como aderezo de ensaladas, mezclado con aceto balsámico, o en forma de aliño, dejándolo reposar en un pequeño bowl o recipiente en el que incluya orégano, albahaca, tomillo o cualquier otra hierba a su gusto. Como los aceites en general tienden a retener los aromas, logrará un aceite "saborizado" que agregará sabor a vegetales crudos o cocidos.

• Ajo

Si bien se han señalado propiedades reductoras del colesterol "malo", para que este efecto tenga una trascendencia significativa sería necesaria la difícil tarea de consumir varios dientes de ajos al día. No obstante, es recomendable utilizar este vegetal-condimento en todas las preparaciones que pueda, ya sea en forma de picadillo, en polvo o incluso entero (lo que en cocina se conoce como ajo en camisa, es decir, incluso con su propia piel, para luego retirarlo de la preparación). Puede utilizarse también en vegetales conservados en vinagre o agregado, en forma de picado fino, a mayonesa de bajas calorías, para aderezar ensaladas.

• Almendras

Existen trabajos que han señalado que el consumo de 30 gramos de almendras diarios es capaz de reducir el colesterol LDL hasta en 13 a 20%. El contenido de vitamina E de esta fruta seca es importante, por lo que es un vehículo importante de antioxidantes que protegen del daño en las paredes arteriales producido por los "radicales libres", que son sustancias químicas tóxicas para los tejidos del organismo. También suelen ser una buena fuente de calcio. Para realzar el sabor puede hervirlas ligeramente, extraer la piel y luego tostarlas, o tostarlas directamente. Pueden utilizarse no sólo en preparaciones culinarias típicas de la comida china, sino también espolvoreadas en yogur bajo en grasa o en preparaciones de verduras al vapor, acompañadas por pollo o pescado a la parrilla.

Recuerde estos consejos y, si le gusta la cocina, cree nuevas recetas con estos alimentos.

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